Antonimo de la palabra lustrar
En oposición al brillo que imparte lustrar, existen términos que evocan la falta de resplandor o el deterioro de una superficie. Estos antónimos ofrecen una rica paleta de matices lingüísticos para describir lo opuesto al acto de pulir o dar brillo.
10 Antonimo de la palabra lustrar
1. Ensuciar: Implica hacer algo sucio o mancharlo, lo contrario de limpiar y dar brillo.
2. Manchar: Significa dejar una marca o una señal que ensucia o afea algo que antes estaba limpio o lustrado.
3. Opacar: Hace referencia a quitar el brillo o la claridad, dejando la superficie sin lustre.
4. Tiznar: Consiste en ensuciar con hollín o una sustancia negra y grasa, opuesto a lustrar que busca resaltar el brillo.
5. Raspar: Implica desgastar una superficie, a menudo quitando la capa lustrada o pulida.
6. Rayar: Se trata de hacer marcas o líneas, generalmente dañando el acabado pulido o brillante de un objeto.
7. Emborronar: Significa manchar o ensuciar algo de manera que pierda su nitidez o limpieza.
8. Arruinar: Se refiere a dañar algo de tal manera que pierda su aspecto original lustrado o su funcionalidad.
9. Deslustrar: Literalmente significa quitar el lustre, dejando un aspecto apagado o sin brillo.
10. Corroer: Este término implica un daño más profundo y permanente, donde una superficie se ve afectada químicamente y pierde su brillo original.
5 inflexiones Antonimo de la palabra lustrar
1. Ensuciando: Participio presente del verbo ensuciar, indica la acción de estar en proceso de hacer algo sucio.
2. Manchada: Adjetivo femenino o participio pasado de manchar, refiere a una superficie que ha sido marcada o afeada.
3. Opacado: Participio pasado de opacar, se utiliza para describir algo que ha perdido su brillo o claridad.
4. Tiznado: Participio pasado de tiznar, indica que una superficie ha sido cubierta o afectada por hollín.
5. Arruinada: Adjetivo femenino o participio pasado de arruinar, se refiere a algo que ha perdido su estado o calidad original.
¡Y eso es todo, amigos del brillo y la opacidad! Espero que hayan disfrutado este pequeño viaje por el lado menos resplandeciente de las palabras. No dejen que sus conocimientos se opaquen y sigan indagando sobre el fascinante mundo de los antónimos de lustrar. ¡Brillen con su sabiduría... o en este caso, manténganse maravillosamente matizados!
Deja una respuesta